Mercado chino abre nuevas puertas para empresas costarricenses

Fabio Piedra, consultor en Comercio Internacional con más de 30 años de experiencia.

China, la segunda economía más grande del mundo, continúa abriendo sus puertas para países como Costa Rica.

Aunque las exportaciones nacionales han crecido a doble dígito en algunos sectores, aún queda un largo camino para aprovechar plenamente las oportunidades que ofrece este mercado, de acuerdo con Fabio Piedra, consultor en Comercio Internacional con más de 30 años de experiencia.

El café de especialidad se perfila como una oportunidad para los exportadores costarricenses, sin embargo, se requiere innovación en los canales de distribución. Según el experto, la clave está en implementar una estrategia comercial diferenciada que combine esfuerzos de instituciones como el Instituto del Café de Costa Rica (Icafé) y Procomer.

“Debemos trabajar con socios comerciales que tengan acceso a plataformas de comercio electrónico y logísticas directas en China. Esto nos permitiría romper con los esquemas tradicionales de comercialización”, dijo Piedra.

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Si bien Costa Rica exportó exitosamente café tostado a través de tiendas libres de impuestos antes de la pandemia, el regreso al mercado implica superar la competencia de nuevos actores como Colombia y otros países latinoamericanos.

Además del café, hay otras áreas donde Costa Rica podría destacar, como lo son los servicios ambientales. China, con su creciente interés por la sostenibilidad, representa un mercado ideal para la venta de créditos de carbono.

“Podríamos aprovechar el mercado de carbono más grande del mundo, ubicado en Shanghái, para generar ingresos significativos”, indicó el consultor.

La movilidad eléctrica es otro ámbito con gran potencial para las empresas costarricenses, donde se podrían explorar alianzas con empresas chinas como BYD, líder en la fabricación de baterías y vehículos eléctricos.

“Costa Rica tiene la imagen verde que estas compañías buscan para consolidarse. Podríamos ensamblar autobuses eléctricos y aprovechar nuestra ubicación estratégica para exportar a toda Centroamérica y el Caribe”, agregó Piedra.

A pesar de estas oportunidades con alto potencial, existen desafíos importantes como la falta de una estrategia integral que trascienda la visión tradicional de exportaciones.

“Hemos perdido el enfoque de la innovación, de romper esquemas, y Costa Rica tiene grandes oportunidades. Abramos un poquito la mente a cómo crear polos de desarrollo estratégico para poder atraer inversión”, mencionó el experto.

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Otro obstáculo es la política de visas restrictiva, que limita la llegada de inversionistas chinos de regiones fuera de Shanghái y Beijing. Abrir estas puertas podría atraer inversiones significativas en sectores clave.

Para Fabio Piedra, la diplomacia comercial debe convertirse en una prioridad para Costa Rica en el siglo XXI. “No se trata solo de vender café o piñas. Necesitamos una visión más amplia que incluya innovación, sostenibilidad y alianzas estratégicas con actores clave en China”, concluyó.

Con el apoyo adecuado y una estrategia bien definida, Costa Rica tiene el potencial de posicionarse como un jugador relevante en el mercado chino, generando beneficios económicos y oportunidades para las futuras generaciones.